En España, uno de cada cuatro hogares consume películas y series en plataformas de streaming como Netflix, HBO o Amazon, según el informe sobre el comportamiento de los espectadores que reciben OTT realizado en el primer trimestre de 2019 por la consultora audiovisual Barlovento Comunicación. Con contenido de calidad y fácil acceso, los usuarios aumentan exponencialmente y es por eso que muchos están interesados en tener un cine en casa con un cine en casa. Hablamos con dos expertos en creación de cine en casa para despejar dudas de particulares y profesionales.
Lis Melgarejo Arquitectos
¿Para qué se utiliza una sala de cine en casa y cuáles son las preguntas más importantes de los clientes? El principal requisito que suele cumplir David Valencia de Digital Luxe es que “el sistema de audio y vídeo sea fácil de usar”. Para Víctor Pérez, fundador de CtrlB Co, empresa dedicada al diseño e instalación de cines en casa, la pregunta que más le hacen es si pueden ver la televisión convencional en interiores o ver un partido de fútbol”. La respuesta es sí.
El acondicionamiento acústico de la sala de cine en casa es fundamental para comenzar a tener un cine en casa, para crear una experiencia de sonido óptima.
¿Cuánto tiempo se tarda en tener una sala de cine en casa? Desde 15 días hasta un mes, pero se puede extender a dos para trabajos más complejos.
En primer lugar, se propone el cálculo de los requisitos técnicos, incluido el proyecto acústico y de iluminación. Además, la estética de la habitación está bien pensada. También en la primera fase se definen los dispositivos de audio y video: el proyector, la pantalla, los parlantes y el procesador.
La segunda fase incluye la ejecución de la insonorización y tratamiento acústico interior, cableado, instalación de equipos, carpintería, tapicería, alfombrado, pintura y calibración final de audio y video.
Gasto de luz y electricidad con una sala de cine en casa
Segun David, el consumo de electricidad de un home theater depende del equipo instalado. Suelen estar protegidos por un UPS/SAI en línea, el dispositivo que suministra energía en caso de falla. Eso suele ser 2000 vatios hora. Como referencia para hacerse una idea, un televisor funcionando 8 horas al día consume unos 3.700 Wh al mes. Según Digital Luxe, el consumo medio mensual de un piso de 100 metros cuadrados ronda los 250 W por hora o unos 19.000 Wh al mes.
Se recomienda disponer de un armario técnico donde se instalarán todos los amplificadores y reproductores fuera de la sala, así como el proyector, para evitar el ruido de los aparatos durante su funcionamiento.
Distribución de los elementos básicos en un cine en casa
- Pantalla: Según el tamaño de la pantalla que instalemos se dimensionará el resto. Se recomienda que la distancia de visualización debe ser al menos 1,2 veces su ancho. Los tamaños de pantalla más comunes son 120 pulgadas (relación de aspecto 16:9) o tipo cinemascope (relación de aspecto 2:39).
- Proyector: El proyector se coloca en medio del techo ya una distancia media de la pantalla, porque la imagen pierde nitidez si está demasiado lejos. Por ejemplo, con una pantalla de 120 pulgadas, el proyector se instalaría a unos 2,5 metros de esta.
- Procesador: El sistema de sonido y video está conectado al procesador. Para un cine en casa, es importante elegir uno que admita al menos la tecnología de audio Dolby Atmos y formatos de vídeo de alta definición para una experiencia inmersiva.
- Altavoz: Una configuración de sonido típica en una sala de estar de lujo incluiría tres altavoces frontales, dos líneas de sonido envolvente a cada lado, dos altavoces traseros, cuatro altavoces superiores y cuatro subwoofers o woofers adicionales.
- Revestimiento: Las paredes reflectantes o de vidrio no se recomiendan para un cine.
- Iluminación: Algunas luces marcadoras crean el efecto de un cine real; Se recomienda poner una luz tenue detrás de la pantalla para evitar la fatiga ocular. Para un ambiente espectacular, nada mejor que las luces ambientales que cambian de color.
- Asientos: La sala de cine en casa puede tener cualquier cosa, desde un cómodo sofá.
